El viernes, la selección Argentina Sub 20 cayó frente a su par de México por 1 a 0 en la final de los Juegos Panamericanos de Guadalajara y se tuvo que conformar con la medalla de plata. Objetivo incumplido si se tiene en cuenta la dimensión del torneo y la calidad de los rivales. Pero más allá de no haber conseguido el oro, fue la mejor posición de una selección nacional en todo el 2011. Entonces: ¿La plata no vale?
Haciendo un análisis de lo que habían sido las actuaciones de las selecciones juveniles en lo que va del año, y más precisamente de lo que fueron las presentaciones de la Sub 20, este cierre, llegando a la final de una competencia continental, es más que decoroso. Sobre todo, si se tiene en cuenta que antes, Argentina había quedado eliminada en cuartos de final del Mundial de Colombia, había quedado tercera en el Sudamericano de Perú y no se clasificó para los Juegos Olímpicos de Londres del año que viene.
También, hubo un montón de cosas fuera de la cancha que afectan a cualquier grupo de trabajo. Partiendo desde que Walter Perazzo, DT de la selección, fue cuestionado miles de veces y hasta muchos daban por hecha su salida después de la eliminación en el Mundial, pasando por la eterna puja entre la AFA y los clubes por la cesión de jugadores a la mitad del torneo local, léase River-Cirigliano, e inclusive por los pocos entrenamientos que tuvieron los chicos antes de viajar a Guadalajara.
Además de todas estas contras, no hay que olvidarse que en el camino a la final Argentina empató y mereció ganarle a un Brasil que no pasó la primera ronda, y en semifinales venció a Uruguay, tal vez hoy en día la mejor selección de Sudamérica. Todas cosas que hay que evaluar a la hora de hacer una crítica.
De todos modos, y no por entender que no fue un mal resultado, creo que hay muchas cosas para mejorar. Es imposible que un equipo dependa tanto de las grandes actuaciones que pueda llegar a tener su aquero. No se puede permitir que una selección no cuente con un plan b cuando no le encuentra la vuelta al partido. Tampoco se le puede jugar de la misma manera a Brasil que a Cuba o a Costa Rica, porque más allá de las realidades de cada conjunto, hay una diferencia abismal en cuanto a la calidad de cada uno.
Así, entiendo yo, que la actuación Argentina en los Juegos si bien no fue brillante es digna de un reconocimento. Porque al fin y al cabo, la plata vale.
Así, entiendo yo, que la actuación Argentina en los Juegos si bien no fue brillante es digna de un reconocimento. Porque al fin y al cabo, la plata vale.
Correcciones:
ResponderEliminarBien la idea de nota de opinión, pero no del todo bien ejecutada.
La primera persona no debería estar. Hay que dejar en claro tu postura si caer en el "yo".
Falta profundizar los argumentos.